
1991
Director: Jon Avnet
Guión: Fanny Flagg y Carol Sobieski
Música: Thomas Newman
Fotografía: Geoffrey Simpson
Intérpretes: Jessica Tandy, Kathy Bates, Mary Stuart Masterson, Mary-Louise Parker
Valoración: ****
Aunque no soy nada mitómano ni de actrices ni de actores, ni tampoco de directores o directoras, si alguna vez, tiempo atrás, tuve algo parecido a una "película favorita" sin duda esa fue Tomates verdes fritos, por lo que me ha parecido el título más idóneo para empezar esta nueva andadura de blog dedicada a hablar de cine.
La historia parte de un crimen cometido en un pequeño pueblo sureño llamado Whistle Stop, cuya vida gira en torno a su café y al tren que por allí pasa. A partir de ahí se van desgranando dos historias: la contemporánea entre Evelyn Couch, un ama de casa no muy satisfecha con su vida aunque incapaz de hacer nada al respecto, y Ninny Threadgoode, una vivaracha anciana que vive en una residencia acompañando a una vecina; la historia pasada es a su vez la que Ninny va contanto a Evelyn acerca de la amistad en Whistle Stop que a lo largo de varias décadas unió a dos mujeres, Idgie Threadgoode y Ruth Jamison.
Tomates verdes fritos es hasta la fecha, y habiendo visto varias de sus otras películas, lo mejor que ha hecho y probablemente hará Jon Avnet. Y no porque sea un alarde técnicamente, sino más bien por el portentoso trabajo de sus cuatro actrices protagonistas, a cada cual mejor y que convierten sus "pequeñas" historias en algo tan entrañable, que la empatía entre espectador y personajes es prácticamente inevitable, logrando que la cinta sea una de esas "películas con magia".
La historia parte de un crimen cometido en un pequeño pueblo sureño llamado Whistle Stop, cuya vida gira en torno a su café y al tren que por allí pasa. A partir de ahí se van desgranando dos historias: la contemporánea entre Evelyn Couch, un ama de casa no muy satisfecha con su vida aunque incapaz de hacer nada al respecto, y Ninny Threadgoode, una vivaracha anciana que vive en una residencia acompañando a una vecina; la historia pasada es a su vez la que Ninny va contanto a Evelyn acerca de la amistad en Whistle Stop que a lo largo de varias décadas unió a dos mujeres, Idgie Threadgoode y Ruth Jamison.
Tomates verdes fritos es hasta la fecha, y habiendo visto varias de sus otras películas, lo mejor que ha hecho y probablemente hará Jon Avnet. Y no porque sea un alarde técnicamente, sino más bien por el portentoso trabajo de sus cuatro actrices protagonistas, a cada cual mejor y que convierten sus "pequeñas" historias en algo tan entrañable, que la empatía entre espectador y personajes es prácticamente inevitable, logrando que la cinta sea una de esas "películas con magia".
No hay comentarios:
Publicar un comentario